31.12.07

Los niños sátiros

El obispo de Tenerife dice que algunos menores incitan al abuso sexual. Ahí, sí señor, con dos hisopos y un bonete. Anda que se corta un pelo, el gachón. Bernardo Álvarez se llama el curita, quien afirma, además, que hay niños que se muestran completamente de acuerdo con que se les sobe, se les babee y se les sodomice, porque lo que les pasa es que lo están deseando. Y que, en cuanto te descuidas, te provocan. ¡Toma ya! Supongo que el loco este querrá disculpar así a la curia pedófila que predica la castidad y condena el sexto mandamiento mientras, curia que curia que te curiarás, se muere por tentar carnecitas y meterla en caliente y donde sea, preferentemente en criaturas de silencio manejable. A la Iglesia católica, claro, le ha faltado tiempo para ordenar que no se malinterpreten las palabras de este gañán tan eminente; pero, como siempre, se explica mal o no quiere explicarse. A ver, lo correcto sería hacerle ver a este hombre que, por muy calientes que él vea a los menores, hacérselo con ellos es un delito de cárcel, y que el problema no es que los nenes y las nenas provoquen o no, sino la aberración anti natura de la castidad forzosa, que pudre el alma y lo acaba pagando quien no debe.

El polvo y la pelusa

Suplemento "Crónica de un año"
Un buen porcentaje del polvo que se acumula en nuestros hogares son residuos de piel muerta, de nuestra propia piel muerta. ¿Se imaginan? Da un poco de asco y de pena pensar que gran parte de esas pelusacas que barremos de debajo de la cama constituyeron el formato de nuestro pellejo. Por cierto, que las pelusacas no se forman como pelusacas propiamente dichas, quita, sino como capas de polvo normalicas, lo que pasa es que a la menor corriente de aire que lo mueva, ¡raca!, el granulado polvo microscópico y acaroso se convierte en pelusaca, no te digo nada si además se le unen pelos por el camino, rizados o lisos, porque entonces la pelusaca halla en ellos un eje al que aferrarse y tomar cuerpo con mejor acierto y solidez y es cuando la pelusaca sabe agarrarse al cepillo o escoba con la tenacidad de una lapa o de un gerente de la Diputación, tanto que, finalmente, no queda más remedio que despegar la pelusaca de la escoba con los dedos y echarla en el badil, cosa que no deja de ser un lamentable gesto de derrota y abandono, qué triste. Esto no tiene mucho que ver con el fin de año, ya lo sé, pero es que me apetecía escribirlo. Y ya está dicho. Por lo demás, qué duda cabe que la mitad de la capital jaenina sale hoy de 2007 enfurruñada, llorosa o directamente rabiando. Porque este ha sido el año histórico de tener alcalda, la Carmen Purificación de los Remedios Peñalver Pérez, pero eso le importa poco a la mitad de la que hablo, casi diría que también a la otra mitad: a la mitad de la que hablo lo que le revienta es que la ciudad penetre en 2008 siendo sociata e izquierduna, si bien no faltan los frotes y refrotes de manos y de manotas frente a los encabronamientos y diretes, sin dimes, con los que, a tan temprana edad de legislatura, nos amenizan la velada alcaldas, tenientes y concejales de Cultura, por no hablar de los que no sabemos y tampoco pienso contar, que me juego la paguica que me da el PSOE por ser activista mediático, y eso nunca, antes me vacío los ojos y me ato la lengua al pescuezo. Así empezaron los otros, los peperotis, pero fue más tarde, o al menos nos enteramos después. Una de las bombas de este Gobierno municipal es la Universidad Popular, entérense, porque me parece a mí que ustedes no se enteran de nada y se creen que la Universidad Popular no es más que un sitio del Gran Eje en el que van las abuelas a hacer encajes de bolillos y a bailar la jota. Qué va. Ahí hay peligro, ahí no se habla nadie con nadie, el Montané no puede ni ver al Ángel Cajigas, director de la cosa, y el aún virgen edificio de la nueva sede de la UPM no se va a utilizar mientras que no rueden las cabezas izquierdatas que el PSOE quiere, porque el PSOE no está agusto con la IU, eso se ve, no está agusto, le ha entrado vocación decapitadora y eso lo paga la ciudadanía, como siempre: los que fuimos con la papeleta a ponerles un sueldo. Qué hastío. Pero bueno, tenemos cortinglés, uno grandote. Ahí nos desahogamos. Y las jaenitas siguen estando muy buenas, váyase lo uno por lo otro. No todas, pero sí muchas. Laírgen qué buenas que están. Feministas a vuestros quehaceres. Y ahora que lo pienso, salimos del año hoy sin Camarín para Nuestro Padre Jesús, todavía, pero aquí mejor me callo. Que sea cuando dios quiera o el Cirineo diga ¡ahora! Sí, mejor me callo, que me embalo y después me tiran cosas por la calle. Culturalmente, en la capital todo sigue juntándose los jueves, últimamente también los martes, y eso es todo, o sería todo si no me diera por mentar a los nostálgicos amigos de la Cristina Nestares, esto es, del Festival de Otoño, que ya no tienen entradas gratis y encima les traen cosas de rojos. Del nuevo teatro Como Coño Quieran Llamarle (Miguel Hernández, ahí estoy con Palomo el de la Ser) dicen los que ya lo han visto que hay alguna cagadita que otra, pero bueno, a ver si le echamos la bendición prontico, antes que al Museo de Arte y Arturo Ibérico (al menos) y dejamos el Darymelia para una central farmacéutica o algo así. El Real Jaén mal, como siempre, pero yo de fútbol no entiendo, ni me gusta, por mí como si lo quitan. Lo importante y penoso es que los autobuses Castillo siguen conservando el torno tercermundista que ya no tienen los autobuses de ninguna capital española y no se nos cae la cara de vergüenza. Esto es Jaén: aquí hacemos libretillas en las hamburgueserías con partes médicos. Acostumbrados al ridículo, indolentes frente al cutrerío. Y con la mierda de himno que tenemos. Si no fuera porque esto de vivir aquí es un vicio, yo me iba. Pero se van a quedar algunos con las ganas. Mientras haya bares… Y un buen nipollas. Dicen los poetas de la tierra que en los Palace madrileños se casca de Jaén y de sus verbos, así que el pitido de oídos viene siendo insoportable. A ver por qué leche han de nombrarnos tanto el verbo en los Palace madrileños, yo es que no me lo explico. El polvo, antes de ser pelusaca, tiene la habilidad mágica de colarse por la más mínima rendija de nuestra ventana y de nuestra conciencia. No hay guiso que nos papeemos sin su aderezo de polvo. La pelusaca le hace compañía a los niños cobardones y a las señoritas solteras y feas. Y yo no he empleado ni un solo punto y coma en este artículo.

28.12.07

Inocentes de hoy

Que hablen los inocentes, si es que pueden, si es que les dejan, si es que quieren, si es que no los asesina un Herodes moderno, un Herodes trajeado, un Herodes pillastre, rico y respetable. Que griten los inocentes, sin mordaza y con tranquilidad. Los chillidos tranquilos hacen mucha pupa, habría que ensayarlos más en la intimidad de nuestros hogares, habría que practicarlos cada dos por tres, incluso sin ton ni son, a la buena Miguel. Los periódicos ya no publican inocentadas porque quedan muy pocos inocentes y, los que quedan, no han salido del armario de formica y sin apenas perchas de las que pensaban colgarse como trajes planchados, ahítos de suavizante y sin pelusa de maldad en los bolsillos. Un día conoces a un inocente y, a los tres segundos de mirarlo, se te vuelve mordaz, cáustico, descreído. Herodes no fue un niñicida, fue un Hitler con sotanaca y tunicorra (ay, el cine) que sospechaba que, algún día, los inocentes se le subirían a la chepa, a su chepa y a la de la globalización esa que nos cuentan y nos cantan los fascistas de Internet. La inocencia es un defecto que se carga la edad, no hay nada más aberrante que un chiquillo resabiado, avisado, a la defensiva. Eso lo sabía Herodes, el tío.

27.12.07

Bolondrón Chaves

Otra vez. Este hombre es que es especialista en echarse de vez en cuando una espuerta de cascotes sobre la cabeza. Cierto que ya tenemos asumidas las mentiras y las gaitas preelectorales de cada político, que a nadie le sorprende ni le indigna a estas alturas el bla bla bla vacío que nos cuentan para que les votemos y no porque en realidad les preocupe ese bla bla bla, que suele sudársela a casi todos; pero, a ver, a lo que no hay derecho es a que Manuel Chaves, después de tantísimos años ocupando el poder de la Junta de Andazarrías, diga ahora que confía en llegar al pleno empleo en un periodo de siete años. Laírgen, nene, ¿se puede saber cuántos años hacen falta entonces para dejarnos colocados a todos? ¿O hablamos mejor de siglos? ¿Qué leches han estado haciendo en las sucesivas legislaturas pasadas? ¿Verlas venir y sonreír con babilla y ojo bobo? Además, el pleno empleo es imposible en Andalucía y en España, vaya pedazo de bolondrón que pretende meternos el Chaves, quien me parece a mí que se cree en la oposición desde que llegó a la presidencia autonómica. Habla como la oposición, porque cuenta las muchas cosas que puede hacer por esta tierra si le votamos. ¡Anda y vete a cagar!

26.12.07

Puticlub y metáforas

Dice la calle, que es muy sabia: “Cucha el Castillo, nene; si parece un puticlub”. Puticlub Santa Catalina: moras, cristianas y chicholinas; cerveza, combinados y Fino La Ina; te sedan el ánimo y te avivan la cho… la chola, que de tanto pensar en vencer la tentación baja mucho, Josefina. Y suda. Qué gracioso y qué bonito es llamarse Josefina, a mí me gustaría una barbaridad llamarme Josefina, pero no pudo ser. “Cucha el Castillo, nene; si parece un puticlub, ¿a que parece un puticlub?”. Romería nocherniega de la luz villancica, al bacalao más que a la sardina, cerro de los pecados nuestros, ojo alto con pestañas de follaje y pitarras de litronas, la cruz se retira de su vera y le guarda el aire, como debe ser, cruz pudorosa y mirona, más sola que un perro muerto, claro está, y más tiesa que un orgullo fingido. “¿No has visto el Castillo, nene, que parece un puticlub?”. Jaén no es Málaga ni Sevilla ni Cádiz, pero tiene su retranca y donde los cursis ven magia y fantasía, otros ven un puticlub, quieren ver un puticlub. Jaén es muy de puticlub. Yo rara es la vez que no veo a Jaén entero en el puticlub, cuando la tarde languidece y renacen las sombras, muy serio, muy bien vestido y tragando saliva, haciendo cuentas.

24.12.07

Cacharrería mohosa

No me voy a cansar. Creo que esta es ya la tercera o cuarta columna que le dedico al asunto. Y no me voy a cansar de abordarlo, no señor. Ni en el día de Nochebuena. Es una obsesión, un tirriazo, una feroz pesadilla que me he empeñado en quitarle a esta ciudad que nos vio nacer y que nos ve patalear a diario. A cuenta de la subida del precio del billete que proponen, dice el señor Castillo que los autobuses urbanos jaenonchos ofrecen uno de los servicios más modernos y avanzados de España. ¡Y una leeeeeeche! Hasta que no quiten el torno de entrada, ese torno rocotrocó que uno empuja con el bajo vientre, los autobuses urbanos de Jaén serán un monumento rodante al cutrerío más anacrónico, a la cacharrería mohosa, a lo rancio y a lo porculero. Por lo visto, para la empresa Castillo la invención del torno marcapasajeros ha sido el acontecimiento más relevante del siglo XX, del XXI y de los que queden, el no va más en tecnología punta, y ya pueden poner máquina de tíquets y lector de tarjetas, que ellos no se fían más que de su torno y ahí lo conservan a cara perro mientras que los autobuses de todo el país ya hace años y años que lo eliminaron. Pero, a ver, si son los Castillo. Ellos a lo suyo.

21.12.07

La mañana de mañana

Bonita mañana la de mañana para los ociosos intelectuales de izquierdas que vivimos del cuento, una de las pocas que nos levantamos temprano, pese al resacón, a fin de no perdernos el llenado de los bombos, al braserico, en pijama y bata, con nuestra copita de anís y nuestro par de pestiños, con nuestra participación de lotería delante, Chacinas Chuscas, con nuestra erección matutina no del todo apagada, mientras las mujeres limpian el polvo, friegan el váter y airean los cobertores a nuestro alrededor, quita que no veo, como te pongas ahora con la aspiradora no te compro para Reyes el orinal que te prometí, barre con la escoba, como se ha hecho toda la vida, si te viera mi abuela, y tráeme más pestiños, que va a empezar el sorteo, cuchi, hay chiquillos inmigrantes de San Ildefonso, ¿harán trampa a la hora de cantar los números? La de mañana es la única mañana que los ociosos intelectuales de izquierdas que vivimos del cuento rezamos plegarias verdaderas al único Dios posible, Señor mío Jesucristo, sácame el Gordo, si es verdad que existes, sácamelo, yo en el fondo no soy malo y creo que me lo merezco, tú me sacas a mí el Gordo y eso me basta como señal de tu omnipotencia. Amén.

20.12.07

Pobres monitores de la UPM

Permítanme que irrumpa hoy en la intimidad de sus sentimientos para hacerles partícipes, en estas fechas tan entrañables, de la pena que da leer unos cartelitos que, pegados con desafín en las dependencias de la Universidad Popular Municipal de Jaén, convocan a los monitores, mañana día 21, a su ágape de Navidad. ¿Y qué pasa? ¿Acaso es triste que los monitores de la UPM disfruten de sus Pascuas en amor y compaña, como si fueran seres humanos normales y corrientes, tocando la pandereta y haciendo así con las manos, la mar de contentos? No, por supuesto: eso qué va a ser triste; pero sí lo es que, según los cartelitos, cada uno tiene que llevar su propia comida y su propia bebida, porque de lo contrario se iban a comer lo que yo me sé. Y como este columnista también tiene corazón y jamás olvida su condición de servicio público, desde aquí hago un llamamiento al Ángel Cajigas, director; al Montané, concejal, y a la Puri, alcalda, para que no permitan este picnic tortillesco y empanado y se gasten unos cuartos en adecentarles una buena tasca a esas criaturas que, unos más y otros menos, también son hijos del Ayuntamiento y sobrinos de la CGT. Que después todo es criar mala sangre.

19.12.07

Míralo fijamente

No te fíes, porque, después de la comida navideña de empresa, tu jefe seguirá siendo el mismo tiparraco aborrecible de siempre. Los jefes, todos, sin distinción, incluso ese tan bueno y tan cabal, el hombre, siempre son los mismos tiparracos aborrecibles de siempre. No te fíes. Ríele un poquito las gracias si no tienes los suficientes arrestos para ponerle cara de palo, pero, por dios, quédate en eso, no te fíes, no te arrastres, gusano. Él no te está invitando a comer, te está echando unas migajas para disfrutar viendo cómo lames el suelo a gatas antes de que puedas quedarte a solas con tus langostinos domésticos en Nochebuena, esos langostinos de los que él está convencido de que son de su propiedad, como tu sangre y tu horario, como tu tiempo y tu vida, como tu alma a medio contratar. Míralo fijamente durante la comida, asiente a sus tonterías, a sus coñazos, a sus babas, come tú con corrección y no pares de desearle que se le atragante la pelota de bistec que no deja de rumiar como el cabrito de postín que es. Imagínatelo en el suelo, pataleando, y a todos los empleados abanicándolo con las nóminas como único socorro. No te fíes. Nunca te fíes. Con el espíritu de la Navidad él se limpia el ojete.

18.12.07

Al olor del conejo

Pues anda que no está rico el conejo. Todos los conejos. "El conejo bendito, que es el conejo agarrapito; el conejo blando y sabrosón, el conejo duro y regalón, el conejo verde aventurero, el gentil conejo cipotero, el montaraz conejo pipudo, el conejo abierto y en embudo y el vil conejo conejero” (basado en un poema de Camilo José Cela). Al Acebes le parece antiguo eso de comer conejo y una barbaridad que Rodríguez Zapatero se lo recomiende a los españoles para esta Navidad. Qué poquitos buenos conejos se habrá comido Acebes, qué lástima de hombre, así está de pálido. Mi madre lo prepara con una salsa de almendras que te caes pa’trás y mi novia lo cuece con tan efectivo golpe de horno mañanero que te caes pa’lante y ya no te puedes levantar en un buen rato. Ay qué gustito pa mis orejas, con estos fríos. Es buen síntoma que el socialismo aconseje el conejo y que la derecha le haga ascos: significa que la política empieza a encauzarse correctamente. Vamos al conejo, es nuestro destino y nuestro origen. España es conejera, con arroz, con afición, con mucha ternura o a lo ceporro, esto es, comiendo conejo a dos carrillos y haciendo ruido al sorber. Que el conejo nos salve. Eso es todo, amigos.

17.12.07

Con papel de fumar

Mira que pasa veces, por lo que ya debería estar uno acostumbrado y, por tanto, volverse indolente frente al repetido asunto; pero no puedo, maldita sea, no puedo. Se me siguen bajando al estómago los demonios y se me sigue subiendo la mala sangre a la cabeza cuando saltan los gazmoños de nuevo cuño a encajar el alarido en el cielo por hechos tan gravísimos y trascendentales para el mundo como que unas azafatas, las de Ryanair, posen en biquini para un almanaque. La leche que les dieron. Hay formas de hacer el ridículo, pero la suya no se puede soportar. Son los mojigatos de siempre, los moralistas seculares, los que se la cogen con papel de fumar y se lo santiguan tras cada micción, lo que pasa es que ahora se disfrazan de progres y de mucho siglo XXI, con su cosa de la denigración de las mujeres, de la sociedad hecha a medida del parvulario, cuando en realidad lo que les escandaliza son sus propios sentimientos ante tanta carne joven y buenota. Son viejas beatas criticando a la fresca del pueblo, o sea, y con ello buscan un ratito en los medios de comunicación para que todos sepan que, como ellos de decentes, quedan pocos. Son los que hoy apedrearían putas en nombre del progreso.

Jesús Tíscar gana el IX Certamen de Relatos Cortos "Tierra de Monegros"

www.premiosliterarios.com
www.diariodelaltoaragon.es

Jesús Tíscar Jandra, de Jaén, ha ganado el IX Certamen de Relatos Cortos Tierra de Monegros, convocado por la Mancomunidad del mismo nombre, con la obra Cohetes de fin de fiesta, por la que ha recibido 2.000 €. Tíscar, de 37 años, dijo sentirse "alegre y muy feliz al recibir un premio como éste que cuenta con un gran reconocimiento y valoración en el mundo de las letras por su seriedad y trayectoria", según recoge la crónica del Diario del Alto Aragón. El texto ganador cuenta la situación de una chica de barrio que gana un concurso de belleza y rezuma felicidad por las expectativas de fama que ello le reporta, ocultando la cruda realidad de un padre abusador. "He querido hacer ese contraste que tanto me interesa en literatura de lo que es la sonrisa que se ve y la tristeza que se esconde", comentó el ganador. Según Jesús Tíscar, que ya ha obtenido importantes premios en el campo de la narrativa, su padre literario es Francisco Umbral, "soy de literatura española: Cela, Delibes, Juan Marsé, Ignacio Aldecoa, de quien he bebido mucho a la hora de escribir mis cuentos". No descarta un próximo libro ambientado en Los Monegros, ya que muchas de sus historias "se desarrollan en un ambiente rural y éste es un paisaje muy literario". Otro de los temas recurrentes en su literatura es el sexo, no en vano con tan sólo 18 años quedó entre los finalistas del premio 'La sonrisa vertical' el año que ganó Almudena Grandes con el célebre Las edades de Lulú. "Uno de mis temas preferidos en literatura es reducir al ser humano a la animalidad de la que procede y creo que en el sexo es donde más se manifiesta; este tema persigue mucho mi obra, no desde un punto de vista erótico, sino más bien primigenio". Esta perspectiva se ve magníficamente reflejada en su La Poetisa, con la que obtuvo en 2005 el Premio de Novela Felipe Trigo.
El segundo premio, dotado con 1.000 euros, ha sido para la zaragozana Patricia Esteban, por su relato Ada Neuman, que narra la historia de una alienación: una mujer que pierde todo, su familia y las cosas que más valora, porque aparece una vecina que representa todo lo que ella querría ser. Los accésits, dotados con diploma, lote de libros editados por la Comarca de Los Monegros y 120 euros para canjear por libros, han recaído en el vallisoletano Manuel Cuadrado por Ciclos vitales y en las madrileñas Eva Barro por Sobrevivir y Margarita Borrero, por El Oso de Santiago se sube al sauce. El Premio Monegrino al mejor relato ambientado en Los Monegros, dotado con 1.500 euros, fue ex aequo para Alberto Ferrero por El perro de Juan Bellaco, que narra la historia de un perro ambicioso, y para Miguel Carcasona Brau, por Durante la lluvia, en el que que un hombre recuerda sus aventuras de adolescente en el antiguo cine de Sariñena.

14.12.07

Pobres de diciembre

Como canta Serrat: Disculpe el señor, pero no dejan de llegar pobres al recibidor... Pobres de solemnidad tras la gélida aceituna cruda que se comió Fishler, aunque ellos, los pobres, no lo sepan. Son los pobres de diciembre, bienvenidos hasta que sobran, malhallados mientras permanezcan, bienaventurados cuando se van con la pobreza a otra parte, sin música. Por Navidad, Jaén se viste de luces y de pobres. Luces de cristal, pobres de cartón. La oliva es un tesoro mitológico que atrae a los pobres, que se alimenta de pobres que apenas pueden alimentarse. Aquí le rezamos a la oliva todas las noches dos padrenuestros y, por las mañanas, un avemaría, y le erigimos templos llamados “Tierras del Olivo”, en los que recibimos a reyes, pero no a los pobres. En esos pabellones se debe estar tan calentito, y son tan amplios... Por curiosidad, ¿cuántos pobres cabrían? Voluntarios adecentan el viejo y húmedo y antiguo y triste Centro Municipal de Acogida de Transeúntes para seguir almacenando pobres. “Esto no se calienta ni con estufas”, gime uno de ellos. Brindo por los voluntarios; no cualquiera se pasa horas fregoteando y montando camas gratis para un pobre, ni para dos, ni para diez, ni para mil.

13.12.07

Aclaro lo de Colega

No pido perdón al Colectivo de Gays y Lesbianas de Jaén, pero sí lamento haberles hecho daño con mi columna del pasado martes. Cultiva uno de vez en cuando un género articulístico que yo llamo “artículo teatro” y que no me trae más que disgustos y sinsabores, si bien no pienso abandonarlo del todo, entre otras cosas porque soy muy cabezón y no escarmiento. Dicho género consiste en situarse en el lugar del criticado para, precisamente, ponerlo a parir usando sus mismos argumentos, pero inflando el texto de caricaturas verbales, barrabasadas o cursilerías tan grotescas que serían impensables (y este periódico no permitiría) en una columna, digamos, “escrita en serio”. Ese recurso utilicé con los de Colega a cuenta de su propuesta de rebautizar Safo una calle jaenerica, cosa que me parecería muy bien mientras no se les ocurra ponerle Carmen de Mairena a la mía, un respeto. Ellos no lo han entendido así y, además, sus explicaciones me han convencido: ya se les ataca bastante como para que, encima, también parezca que les machaca quien pretende defenderlos. No era mi intención machacarles, aunque no lo pareciera. Por eso ésta no es una columna de disculpa, sino de aclaración y sosiego.

12.12.07

Juzgado de lo Penal

Leche y releches: un arzobispo, el de Graná, condenado por un juez de carne y hueso a pagarle casi cuatro mil euros al cura que lo denunció por coacciones e injurias. Toma ya, dale que dale, arsa que arsa, viva la Pepa, mira que mira, funfunfún. Que si me entiendes. Estas cosas le hacen a uno ir frenando en el concepto tan momificantemente viejo que tiene de la sociedad que llamamos actual. Un arzobispo en el banquillo, cucha tú qué cosa más moderna, más igualitaria y más edificante. Que no decaiga, a ver si ahora nos vamos a dejar llevar por los remordimientos y las supersticiones y se acaba lo bueno, o sea lo justo. Al derecho canónico, que suena tan bovedano, se le ha quedado un hilito de voz frente a los derechos constitucionales que el titular del Juzgado de lo Penal número de 5 de Granada, Miguel Ángel Torres, mi héroe más reciente, ha aplicado contra varios siglos de mitras duras y hostias hechizadas. ¡Inquisición! El canto gregoriano de los dogmas y las infabilidades sagradas se ha visto ahogado en la capital alhámbrica por una musiquilla de hoy, la que nos pone a todos a bailar sin distinción, incluso a la más fea. Al juez lo castigará el Señor, claro, pero se lleva un arzobispo por delante.

11.12.07

¡Viciosos, pervertidos!

Ya está bien de tanta modernura, de tanto progresismo y de tantísima poca vergüenza. ¿O es que no se han enterado ustedes, mis fieles, de que, entre las muchas barbaridades que se les han ocurrido a los de Colega, incluyen la guarrería de ponerle Safo a la actual calle jaenita del Teniente Bago? A ver si no es pa… ¿Va a ser lo mismo indicarle a un forastero que tal lugar está en la calle del valeroso teniente (muy anterior al régimen franquista, por cierto) que en la de la bollacona griega esa, cuya mera pronunciación de su nombre ya nos pone un pecado húmedo en la lengua? A mí se me caería la cara al suelo del sofocón. Una cosa es querer cargarse la gloriosa historia de nuestra patria, tal y como ahora viene siendo afición, y otra muy distinta es convertir el callejero de Jaén en un burdel, en una Sodoma, en una Gomorra, en un nido de serpientes degeneradas. Le exijo al Ayuntamiento que esa propuesta no prospere: como ciudadano y como persona decente se lo exijo. Qué vergüenza, condenar a unos vecinos a vivir en la calle de Safo. ¡Viciosos! ¡Pervertidos! ¡Hijos de Zerolo!

10.12.07

Hijos de Santa Claus

A ver por qué los votantes del PP jaenino tienen que disfrutar también de las maravillosas luces navideñas que han puesto los nuestros. No hay derecho. Esto de la democracia está muy bien, pero tampoco hay que pasarse, que al final le cogemos afición y ya no nos para ni dios. Lo justo sería que pudiéramos saber quiénes son todos los votantes del PP y obligarles a vendarse los ojos con trapos negros cuando salgan a la calle. Ellos harían igual, si pudieran, aunque con la porquería de luces que nos han venido instalando en sus navidades, lo mismo ni hubiese merecido la pena eso de la venda, mejor un tinglado como el de La naranja mecánica para obligar a ver y... Anda, tontos, que no, que es broma, que es que me gusta haceros de rabiar, ¿cómo voy yo a pedir que os nieguen el glamour y el espíritu socialista de la bombillica? También sois hijos de Santa Claus y sobrinos de los Reyes Magos, como los rojos. Lo que pasa es que sale uno de los largos puentes bastante aburrido y muy tolondro y lo que más apetece para despejarse y coger pulso otra vez es darle caña al derechas, tan chillón y pataleador, tan recto y tan Cope. Aunque lo de prohibiros las luces no deja de ser una idea, ¿eh?

7.12.07

Potentado Chaves

Vaya, hombre: ahora que los tres mil euros del saldo de la cuenta corriente de Manuel Chaves empezaban a ser famosos y modelo de austeridad para los cargos institucionales, ¡pumba!, el presidente de la Junta de Andazarrías recibe una herencia de su madre y se le convierten en veintitrés mil. Lo que son las cosas, qué pronto se desbarata un mito, nene. Ya oyeron hace unas semanas al muchachuelo aquel en el programa televisivo Tengo una pregunta para usted, cuando le mencionó los dichosos tres mil euros y Chaves le dijo que todo lo ganado en sus muchos años ocupando cargos lo había empleado en el bienestar de sus hijos. “No me lo creo”, respondió el osado ciudadano. Y Chaves: “Pues si se demuestra que tengo más guita y no la enseño, no dude usted de que dimitiré como presidente de la Junta”. Qué tensión. Ahora lo que pasa es que, claro, con lo de la herencia, Chaves tiene ya tres millones de pesetas y eso no está bien, eso está muy feo. Porque nosotros queríamos un presidente tieso, con su medio kilillo para ir tirando, y no el potentado en que se ha convertido con tanta cifra en la cartilla, que con razón se le ha tirado Javier Arenas al cuello, a ver de qué es tantísimo capital.

6.12.07

Cuestión de ganas

Ahora mismo la sociedad española está muy preocupada porque ha descubierto que sus nenes apenas leen y que cuando leen no se enteran de lo que están leyendo. Que son unos ceporros, vaya. Así que ahora mismo la sociedad española mira atentamente su sistema educativo, por arriba y por abajo, a ver dónde está el fallo, la grieta, el escacharre que le impide que pite. Pierde el tiempo nuestra sociedad española, claro, es su costumbre. Yo creo que eso de leer o no leer se lo procura uno o no se lo procura, no se trata de una cuestión de Estado, ahí con toda su mayúscula. Quien se arrima a la lectura por las vías reglamentarias, esto es, por sí solo o, en todo caso, con la leve ayuda de algún iniciado no demasiado coñazo, verás tú si comprende un texto y, si no, sabe que hay un libraco adyacente a todos los libros, de nombre diccionario. Los demás, que la pelen y les siente bien, están en su derecho, oportunidades tienen para descortezarse la tolondra y no bizquear ante un renglón de más de cuatro palabras, pero no obligación. Hace unos días conocí en Arjonilla a unas señoras que, algunas con ochenta años, están aprendiendo a leer y a escribir ahora. Eso son ganas y lo otro, niñatos.

5.12.07

La mala sangre

Henchidos de PP y turulaticos de odio contra el socialismo gobernante de José Luis Rodríguez Zapatero, con la mirada mancha y retinta que tienen y ese temblorcillo casi voluptuoso que se les pone en la voz cuando insisten en que el presidente del Gobierno es el amiguete de ETA —con la que más o menos toma café y pacharán y pasa muy buenos ratos de compadreo planeando nuevos crímenes—, hay una ultraderechilla chillona y gaznápira que busca un líder y a lo mejor ya lo tiene y no nos estamos percatando o no queremos: un adalid de las cuentas claras y el chocolate espeso, de las salpicaduras de caca, un modelo con el que el facherío se embobe y babee, puede que incluso un sex-symbol para las señoras de abrigoncho y papada floja, esas señoras que no saben aplaudir, pero que aplauden mucho, tipo público de María del Monte, un protagonista que se goce, que se sepa incendiario, se ame y se arme y que, algún día, se sueñe dirigente predicando doctrinas y graznidos desde lo alto de un cadalso. Ya cada acción de los asesinos de ETA es un botín político que despedazar en la batalla por arrebatárselo a la sociedad, para que la oposición lo utilice. Qué maldita pena, qué mala sangre.

4.12.07

El cuchillo en la bragueta

Juzgadas y condenadas las alimañas rijosas de Baños de la Encina, queda un eco de chillidos negruzcos que van de la locura al asco y del asco a las cuevas mugrientas de la condición humana. No nos vamos a preguntar ahora cómo unos padres pueden violar a una hija niña y después vendérsela a unos viejos para que la laman, no somos tan necios, teniendo la respuesta ahí colgada, detrás de la puerta, junto a la escopeta con que defendemos las escrituras de nuestra honra: somos personas creadas a imagen y semejanza de una mierda, poco más o menos, tirando a más. Baños es ese pueblito encantador y con castillo en el que a unos se le helaba la sangre mientras que a otros se le ponía calentorra y espesa como la que hincha las morcillas por estas fechas tan entrañables, tenga usted felices pascuas y guarde su turno, que ahora la criatura está ocupada. La matanza era de niñas y los matarifes llevaban el cuchillo en la bragueta de pana. Baños de la Encina, sí, era ese pueblito donde ya nadie olvida, con su casa del terror y su estigma resignado a la España negra y profunda, la de ahí al lado. ¿Qué pensarán en sus jaulas las alimañas? Supongo que nada, las alimañas no piensan. Se rascan.

3.12.07

La alcalda que nos toca

Nuestra alcalda Purifi­cación toca mucho, es muy tocona, y a mí me parece que eso está muy bien, que toque, que nos toque, que nos reconozca y nos crea a través del tacto. Yo me he fijado y la veo cómo toca, con qué insistencia y, a veces, con qué amor de madre sociatona, tona, tona. Nuestra alcal­da Carmen quiere ser una alcalda cercana y por eso nos impone las manos en los hombros o nos agarra el brazo mientras le contamos nuestras chominás y le exponemos nuestras quejas de contenedores pestosos, señalizaciones deficientes y bordillos mellados. Ella escucha, toca y sonríe, y como ten­gas una pelusa o un hila­cho en el saquito, estate seguro de que te lo quita y lo destierra con toda finura, tras haberlo mira­do un instante con la aguda fijeza de los pája­ros cuando se disponen a pegarle la picotá a un bicho sabroso. Nuestra alcalda Remedios no consiente, y le duele, que un jaenita vaya por ahí con una pelusa en el sa­quito, que para eso también ganó unas eleccio­nes, digo yo, para tener­nos bien puestos. Y ya ven que no lleva escolta, que a lo mejor es por eso por lo que toca tanto: porque no tiene a nadie que le advierta de las in­fecciones que acarrea la piel de la plebe.