17.10.08

Otra foto

Pues yo me voy a pedir para la Feria de San Lucas que viene, como Adana, otra foto. No la de los “diez magníficos que han marcado más decisivamente la diferencia en los últimos cincuenta años”, puesto que no me merezco tanto y porque además son casi todos muy mayores y ya se sabe lo que pasa con los abueletes, que a la nada te están llamando “ñiño”, así, con dos eñes, y regañándote y mandándote a por sillas y a por buñuelos y gaseosas, un tostón. Servidor tiene que resaltar la diferencia generacional y, de paso, hacerse el chulo y el iconoclasta y el irreverente para que todo el mundo diga “cuchi el Tíscar, cuchi el Tíscar, desde luego…”. A mí me gustaría hacerme la foto con algunos personajes que no han marcado nada, ni diferencia ni gaitas ni papa dónde me llevas, que no tienen un duro ni son del Opus ni escriben como dios ni nada, pero que tampoco son transparentes y por eso no dejan de salir en las fotos: personajes vacíos, angustiosos, de mirada torva, mal peinados, con una teta caída, con los bigotes repuestos y la biografía espantosa, carguillos caídos en desgracia, desmigados de cara y con granos de arroz secos pegados en la corbata, beatos rijosos y dos o tres perros lamiéndose el cipotín. Más que nada porque, con esa tropa, uno sale más guapo.

1 comentario:

Felisa Moreno dijo...

A mi también me gustan los personajes secundarios, los tristes, los perdedores, los fracasados... dan mucho más juego en las historias.

Saludos