5.3.07

Adiós, musa Nieto

Fue en el pleno extraordinario del otro jueves cuando mi musa María Dolores Nieto, que tantas columnas me ha dado y por la que tantos suspiros felices he tenido que ausentar, se despidió oficialmente como concejala del Ayuntamiento jaenita. No fue, no ha sido, no será la alcaldesa soñada de los leotardos ceñidos, su armoniosa anatomía de menudita inteligente no conocerá ese sillón del poder, tan castigado de culacos, con la ilusión que me hacía. La Nieto se va, nos deja, se ha ido. Usted que no la vota la ha echado, y usted, y usted, y usted, y usted… ¿Y acaso oigo un sollozar de corazones? Ni de coña. Aquí a los votantes no les sollozan más que las tripas, sobre todo a los del PP. Parte María Dolores Nieto hacia su vida y deja un columnista entristecido de sombra, una voz incomparable en los discursos y un cernícalo primilla que planea en círculos sobre la nada de su existencia huérfana, desorientada de ti, María Dolores, desolada de ti, musa del tiempo, cacho roja. Pero ningún medio de comunicación dirá esto en su portada, ¿a quién le interesa que a la Izquierda Unida de Jaén se le haya marchado el alma despacito y sin aspavientos? Adiós, Loli. Ya sólo serás memoria de la política que me gusta.

1 comentario:

Silvio Gnisci Morgach dijo...

Pues sí, es una pena. Sólo la conozco de vista y por sus intervenciones desde el Ayuntamiento y la verdad, estaba comprometida.

Y de sus sustitutos auguro que les costará superar el listón que ella ha izado.