12.1.10

Y humilde

Han nombrado, por ahí por la parte de San Sebastián, a un polémico obispo que se presenta como “pobre y humilde” y esto me parece un cachondeo hacia los pobres y los humildes de verdad, así que mal empieza la criatura, que hasta algunos párrocos se han santiguado espantados ante la consagración de este “servidor del Evangelio”. En mis cortas luces, me da a mí que un pobre y un humilde no puede ser obispo, no va a llegar a obispo nunca, y si llega es porque ya no es pobre ni humilde, de lo contrario la religión católica sería otra cosa y el Vaticano, una chabola. Vamos a contarle lo de pobre y lo de humilde del obispo este al primero que veamos durmiendo en cartones y acudiendo por las mañanas a desayunar a un comedor de la beneficencia, vamos a contárselo a la familia de cinco miembros y muchos meses de paro, vamos a contárselo a la toxicómana que se gana la droga en el descampado de los jadeos baratos. Bueno, quien tenga valor, que se lo cuente, a riesgo de que le den un esportón de voces. La cosa es que hay que ser como Cristo, ¿no?, pobre y humilde, eso es lo guay, así que esta gente es capaz de asegurarlo mientras luce sus galas y sus obispados, convencidos de que los que no somos obispos carecemos de ojos y de criterio por la mismísima gracia de dios.

1 comentario:

Anónimo dijo...

buenisímo su articulo, menos mal que a ti, como a mí no te censuran el diario jaen, por meterme con los curacos, en mi carta no publicada "aborto y pederatia" y además te pagan. enhorabuena.

ANA CASTILLO SABALETE