19.6.09

La Celia

Nena, Villalobos, Celia, salte de ahí, jamía, salte del PP, ¿qué haces en esa dictadura siglada? Te abstienes en la votación para detener la reforma de la ley del aborto y va el partido y te multa, como ya te multó hace cuatro años por votar a favor de los matrimonios homosexuales y como ya te riñeron hace más tiempo por no estar muy por la labor de la regulación de las parejas de hecho. Dicen que como diputada te debes a unas siglas y no a tu criterio personal, pero eso es una cosa que hay que pasársela con urgencia por el forro de la libertad de opinión, lo antes posible, ya digo, porque si se demora corremos el riesgo de verle sentido y ya la hemos joío. ¿Un partido de “todos a una”, siempre? Ni hablar del peluquín. Las discrepancias internas matizan y enriquecen, eso pasa en las mejores familias y es muy bueno, así hay de lo que hablar en la comida. Tú eres una “progre” de derechas (que están muy bien) atrapada en una secta que no diré ultra, pero que a lo ultra le pega unos lametones cada vez que puede, hasta hacernos saltar las lágrimas. Salte del PP, que te salgas, monta tu partido, como la Rosa Díez, que mira qué bien le va. Me caes bien, Villalobos, porque sacas los pies del tiesto y metes la chorra en el cocido y te quedas tan pancha. Qué agustico se está así.

1 comentario:

fatuca dijo...

Eso, eso. Salte, Celia, salte. Quítate el pestazo a sacristía y reclinatorio.