20.9.07

Derechos y deberes de un violador

Bueno, bien, vamos a ver si yo me he enterado de lo que pasa aquí: lo que pasa aquí es que vivimos en una sociedad democrática y constitucional cuyo sistema judicial permite poner en la calle a un violador a sabiendas de que volverá a violar, ¿es eso? De acuerdo, vale, bien, ya me he enterado. Pero entonces me van a tener que perdonar ustedes, porque está a punto de salirme lo fascista y lo borricazo. Malditas sean la democracia y la Constitución. ¿Lo ven? Ya me salió. Y mira que he intentado reprimirme, pero nada. Malditas sean, sí, cuando sólo atienden al frío papel de los derechos y se los otorgan, con los ojos cerrados, a quien pronto va a ejercer su deber de llevarse a una mujer por la fuerza a un descampado y desgarrarle la vagina mientras le lame la cara y la revienta a puñetazos. El del Vall de Hebrón y tantos otros. ¿Qué les hace suponer a nuestros sabios jueces que un angelito que ha violado decenas de veces, que incluso ha violado cuando le han dado permiso en la cárcel donde estaba preso por violar, se va a dedicar en exclusiva a la meditación trascendental en cuanto las leyes lo liberen? Menos hablar de castración química y más ir pensando en que la Justicia sea algo serio.

3 comentarios:

El antifaz dijo...

Que digo yo que el sillón de los jueces debería ser más incómodo, para que no se duerman, ¿no?
Oye, una cosa. He puesto en mi blog un comentario a tu libro 12 cuentos con premio. Por fin lo he podido leer.
Ya te lo dije: enhorabuena.
Saludos, el antifaz.

Manuel de la Rosa -tuccitano- dijo...

Creo en la reinserción..porque hay quine mata por equivocación , por defensas, por o el que roba...pero el que por vicio-enfermedad o lo que sea que se pudra en la puta cárcel...para que castrarlo químicamente su mente enfermiza hara de la violación un venganza y utilizará palos o cualquier otro artilugio...me salió a mi el borrico ¿pero como no va a ser fascista con tamaños bestias?

Saludos paisano

Sir Alsen Bert dijo...

Y que para ir de la celda al comedor carcelario tenga que follarse a todas las muñecas hinchables que hay expuestas para él solico.
Y si no se las folla, no come. Así de claro.

Y a la vuelta igual -si quiere dormir, claro-