3.4.06

Los tripulantes del velero

Digamos que los colaboradores de opinión somos los cuñados queridos de la redacción de este periódico, ya sobradamente sexagenario, que nos vio componer las primeras papepipopús de corrido. Ahora el JAEN nos ha hecho el regalo de tenernos en cuenta, recolectando algunos de nuestros trabajos a lo largo de veinte años en un cuadrado libro color mostaza, “Un velero de libertad”, cuya sección más prontamente visitada el día de su presentación fue... Pues claro que sí: el índice de firmantes, o sea los tripulantes de la embarcación. “A ver si estoy”, nos afanábamos todos procurando que nadie o muy pocos se dieran cuenta de nuestro ombligo al aire, así como si estuviésemos echándole una ojeada distraída al producto. Qué pellizcos estomacales, ¿verdad?, hasta que el bálsamo de nuestros nombres en letra impresa venía a aliviárnoslo, qué mal rato. Entonces, con la sonrisita satisfecha, pasábamos a comprobar si habían incluido al vecino, si bien, ya, con una cierta sudadera en los bajos, las cosas como son. Eso de estar o no estar e incluso haber aparecido o desaparecido sorprendentemente en una antología da para muchas cañas y rabietas posteriores. Y se pasa más bien, da una risa...

2 comentarios:

J. G. dijo...

¿Y está a la venta tan interesante obra?

Me imagino que también estará el Sr. Calabrús al que por motivos de profesión veo a menudo.

Un saludo.

Sir Alsen Bert dijo...

¿Ese colaborador que recarga su pluma con miel?
Uf, qué tostón.