11.1.08

Laírgen con el teatro

Vaya un cachondeo con la inauguración del nuevo teatro. Tres fechas llevamos ya, espero que la de hoy sea la definitiva. Ganas de marear, leche. Y al final “Infanta Leonor”, ¿no? Ay. Rajaos, que sois unos rajaos. Lo gracioso es que, después de diez años de proyecto y obras, ahora hay que inaugurarlo con el culo entre dos manos, improvisando a calzón quitado. Y todo porque vienen los papás de la niña. Claro, si el teatro se llega a llamar “Miguel Hernández” a ver quién va a venir de importancia a descubrirle la placa a un rojo poeta asqueroso que se murió de frío en la cárcel. Mejor el par de príncipes, que verás tú la plebe lo contentona que se pone. Socialistas de chichinabo, populacheros monarquiquillos. El Montané ha terminado pasando por el aro pelotero y oportunista de la Nestares. Y todo, repito, porque, de improviso, la Casa Real ha dicho “oye, que van los nenes”. Verás ahora cómo las agendas del Chaves y del Zarrías se adaptan perfectamente. Qué repetido, manido, sobado y babeado está todo esto de la política que parece para el pueblo pero es para los políticos. Y a ver qué es eso de “Nuevo Teatro Infanta Leonor”, ¿es que hemos tenido un “Infanta Leonor” antiguo? Vísteme despacio, que tengo prisa.

No hay comentarios: