Vienen para irse de vacaciones

Bueno, y digo yo, ahora entra la nueva corporación del Gobierno municipal y dentro de nada, qué, de vacaciones, ¿no?, de veraneo, a la playica, a la sardinilla, al moreno, al ñiqui-ñiqui y al traca-traca. Laírgen, nene, qué potra, parecen funcionarios. Pues sí que van a tardar en demostrar las ganas de trabajar que tienen, leche. Lo mismo en las negociaciones tan apretadas del jueves pasado lo que más se les resistía a izquierdacos y sociatones eran los turnos vacacionales, que si la primera quincena de julio para mí y la segunda de agosto para mí también, que si cucha qué morro y que si dame a mí la segunda de julio y la primera de agosto porque yo no puedo desaprovechar el apartamento de mi suegra antes de que lo invadan e infecten los buscarruinas de mis cuñados… No, no, no… Habría que dar ejemplo y quedarse aquí todo el verano, aunque sólo sea limpiando pelusas en el Ayuntamiento y clasificando deudas en cajas de zapatos, y no me vengáis con que os merecéis el descanso tras la dura y larga campaña porque dura no ha sido y, además, en el fondo os lo pasáis como los indios, eso no es currar, currar es irse a pastas Gallo a limpiar macarrones por dentro, pero no eso, eso no.