Expertos

Mira tú que la chominá de gastar dineros ahora en unas jornadas en la que “expertos de todo el país debatirán sobre el tranvía y la sostenibilidad”. A la Junta de Andalucía parece que le sobran los cuartos. ¿No lo estáis haciendo ya, leche? El tranvía, digo. Pues ya está, joé, ¿qué más debates se necesitan? Si ya nos habéis convencido de lo guay que va a ser y todo eso. Y aunque no nos hubiérais convencido, las obras van a calzón quitado, quieras o no quieras. ¿Es necesario traer a una porrá de tíos y alojarlos y darles de comer para que nos digan lo mismo? Aquí, a poco que te descuidas, nos endilgan un congreso, unas jornadas, que pagamos todos y a las que luego no acudimos porque ya nos calculamos el pestiñacísimo que van a ser y lo pronto que se nos va a olvidar lo que vienen a largarnos desde los púlpitos del “lo que yo te diga”. A ver dónde se ha visto que un tranvía precise de tanto coloquio. Un tranvía es una cosa que hace chucuchú-chucuchú y entonces vas tú y te montas y le pagas al chófer y te lleva y te bajas y haces tus gestiones, las que tengas que hacer y ya está. Eso no tiene más misterio ni más ciencia. Lo único es que hay que tener cuidado de que no te atropelle. Pero esta santísimas manía de convencernos con expertos es un despilfarro innecesario. He dicho.