El contrario

Es muy posible que las prisas que le han entrado ahora al PP jaenazo para que la Junta de Andalucía comience con la Ciudad Sanitaria se deban a que los derechunos se han enterado, por esas cosas que pasan y ellos averiguan, de que eso va para largo, para larguísimo, si es que va, que lo mismo es que ni va, de manera que electoralmente les conviene exigirle un logro al PSOE, a sabiendas de que no lo van a lograr, de que se van a quedar con las ganas de cortar cintitas y de que van a quedar como unos perracos que incumplen sus promesas. Así funcionan nuestros políticos, ¿sabe usted? ¿O qué se creía usted, pedazo de inocentón? ¿O alguien se cree que al PP jaenazo le preocupa que los ciudadanos no tengamos ya una Ciudad Sanitaria? Sóplame este ojo, Catalina, y después tráeme un sobrecillo de paracetamol. La misma satisfacción le da a un partido político el fallo ajeno que el acierto propio, lo que yo te diga a ti, el mismo color de voto tiene. Durante tu mandato, tú ni te has preocupado; pero ahora que la responsabilidad es de otros, la cosa esa se convierte en lo más importante y parece mentira que eso no esté hecho, hombre, por dios, ¡vamos, venga, venga, venga, deprisa, ya! Todo lo que no haga el contrario es lo que nosotros podríamos hacer si este electorado tuviera la decencia de votarnos.