No recoge el que siembra: se desloma y después le pagan la mercancía con excrecencias sentimentales que ni siquiera se puede comer para subsistir porque ya están caducadas. No le pongas al mal tiempo buena cara: ponle un abrigo, un paraguas, una gabardina, una bufanda…; si sólo le pones buena cara al mal tiempo, te empapas, crujes de frío, te acatarras, pasas mal rato y encima los ojos te los taladra el granizo para que los cuervos que nunca pensaste en criar metan el pico con más higiene. Los pescadores que obtienen ganancias por culpa del río revuelto se lo gastan todo en fulanas baratunas que les pegan la sífilis y ellos a sus esposas y éstas a sus agentes de seguros; entonces los pescadores regresan al río a por más ganancia, pero las aguas están ya calmadas y en ellas flotan fetos y se hunden bolsas de gusanitos, no hay nada que hacer. Dime con quién andas, no te voy a decir quién eres porque me la suda mucho, pero dime con quién andas para estar prevenido por si a con quien andas se le ocurre robarme, matarme o, lo que es peor, ponerte a andar conmigo, anda y vete a andar con tu hermana la pelá. No madrugues, Dios no existe, y como es cierto que tampoco amanece más temprano, guay, así tienes más tiempo para sollozar todo el día.
19.11.08
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