20.9.06

Grandiosa fantochada comunista

A nuestros abuelos los mataron los fascistas para que ahora las entradas de las fiestas del PCE se vendan en el cortinglés. Si la cosa no es para mear y no echar gota, es para mear y echar sangre, una de dos. ¿Y qué tiene de malo el cortinglés? Hombre, pues supongo que, de malo, lo que se dice de malo, no tiene nada, se trata de una empresa muy buen puestecica, en condiciones, tan millonaria... Pero leche, que estamos hablando de comunistas, esos que se ciscan en el capitalismo y llevan a Marx en el llavero, al Che en el pecho y al Cristo Obrero en la rabadilla, arriba los pobres del mundo y todo eso. No pega mucho, ¿no? Sinceramente, a mí me parece que al rojerío patrio lo que le pasa no es que se haya descafeinado por exigencias del guión político, como algunos se justifican y hasta defienden, sino que está más chalao que mis huevos la calle abajo, no riega, no riega, y con eso lo resumimos, para qué tanto análisis. Es lo que tiene la derecha, ¿ves?, que conserva sus ideas y no se le ocurre hacer el ridículo con un patrocinio impropio, de escopeta y perro, en su caso. Cuánta boquilla comunista, jopé, qué asco. Lo próximo qué va a ser, ¿agasajar a la duquesa de Alba? Laírgen, nene, qué pena dais.

1 comentario:

Sir Alsen Bert dijo...

Los tickets para las bebidas en el Supercor...
(he oído)